sábado, 24 de enero de 2009

La Oración

La Lingüística moderna reduce a tres partes básicas la división de la gramática de una lengua: folología, morfología y sintaxis.
Por su parte la sintaxis es la que se ocupa de la constitución de la oración y del funcionamiento de los elementos integrantes, por lo tanto gruarda una relación directa con la morfología, que se encarga del estudio de la estructura interna de esos elementos integrantes, es decir las palabras. En conclusión la sintaxis estudia la función de las palabras y la morfología la forma de las mismas.
La morfología analiza la palabra como una unidad aislada, mientras que la sintaxis prefiere tomar en consideración una unidad lingüísistica más definida: la oración, que es la forma más pequeña de mensaje inteligible. La combinación de palabras con fines comunicativos originan las oraciones y frases.
Funciones sintácticas de las palabras.
La función que cada palabra desempeña en el discurso viene dada por la categpría concreta a que pertenece.

EL SUSTANTIVO
El sustantivo es la palabra que se utiliza para designar personas, animales y cosas, sean éstos reales, abstractos o imaginarios. Existen otras clases de palabras tales como los verbos, preposiciones, adeverbios, conjunciones que pueden sustantivarse, es decir que sin ser sustantivos, es posible usarlos como tales. Para este proceso de sustantivación lo más usual es el uso de un artículo. Las funciones del sustantivo son las de sujeto y objeto. El sujeto se define tradicionalmente como aquélla persona o cosa de la cual se dice algo. El objeto es la función que desempeña cuando complementa el significado del verbo. Puede ser directo, indirecto y circunstancial.
El complemento directo limita claramente la acción verbo. Por ejemplo: los agricultores cultivan sémola. Con el sustantivo sémola la acción del sujeto queda restringida.
En algunos casos entre el verbo y el complemento directo no existe nexo, como en el caso del ejemplo citado, si el complemento designa a un ser animado puede requerirse la preposición a. Ejemplo: No he invitado a tu hermano.
El complemento indirecto completa la información del predicado: los agricultores cultivan sémola para sus familias. Utiliza como nexos las preposiciones “a” o “para”.
Por último el complemento circunstancial es un grupo nominal que aporta al verbo una información de tipo adverbial (lugar, modo, tiempo): los agricultores cultivan sémola en el campo después del verano.

SUSTANTIVOS COMUNES Y SUSTANTIVOS PROPIOS
Los sustantivos comunes o genéricos son los que designan a un sujeto haciendo referencia a todos los de su misma clase y sin diferenciarlos de ellos: niño, roble, verano.
Los sustantivos propios nombran a un ser determinado, excluyendo al resto de los que integran su clase: Pedro, América.
Ortográficamente se escriben con la letra inicial mayúscula. Dentro de esta categoría se incluyen los nombres patronímicos, que designan apellidos (García, Delgado).

SUSTANTIVOS CONCRETOS Y SUSTANTIVOS ABSTRACTOS
Los sustantivos concretos denotan seres que pueden ser percibidos sensoraialmente (árbol, libro), mientras que los sustantivos abstractos manifiestan propiedades de los anteriores o sustancias inmateriales, a este grupo corresponden un gran número de palabras derivadas mediante la adición de sufijos como: ancia, encia, ción, dad, dura, ez, eza,ia, icia, itud, ura. Por ejemplo, constancia, decencia, cualificación, vanidad, cordura, escasez, abundancia, primicia, exactitud, dulzura.



SUSTANTIVOS INDIVIDUALES Y SUSTANTIVOS COLECTIVOS
Los primeros nombran seres individuales e independientes.
Los colectivos son los que designan en forma singular un conjunto de elementos pertenecientes a una misma especie o integrados en un grupo: enjambre (conjunto de abejas), jauría (grupo de perros), cardumen (banco de peces), tropa (conjunto de soldados), docena (reunión de doce elementos), rebaño (hato de ganado).

EL ARTÍCULO
No es posible abordar un estudio completo del sustantivo sin hacer referencia al artículo como parte de la oración que lo delimita o amplía. El artículo señala a la palabra que le sigue en la frase, completa su significado añadiendo información y anuncia su género y número mediante la concordancia , actúa por lo tanto como determinante.
FORMAS DEL ARTÍCULO
Artículo determinado o definido.
Se refieren a un elemento concreto y conocido previamente por los interlocutores (el, la lo, los, las).
Artículo indeterminado o indefinido.
Esta categoría se refiere para hacer referencia a seres u objetos no identificados para el hablante y el oyente ( un, uno, una, unos, unas).
CONTRACCIONES AL Y DEL
Si el artículo está precedido inmediatamente por las preposiciones a o de, el artículo determinado el pierde su primera letra y se une a ellas en una sola palabra: he leído sólo la portada del (de + el) periódico; trata de mirar al (a + el) punto más alto.
Se evita la unión, al menos en el lenguaje escrito, cuando el sustantivo y el artículo constituyen partes inseparables de un nombre propio: éste es el clima característico de El Bierzo.
EL ARTÍCULO Y LOS NOMBRES PROPIOS
Aunque se considera vulgarismo la anteposición del artículo a los nombres propios de persona, la lengua culta permite tal empleo en el caso de apellidos célebres del mundo de las artes y la literatura (el Petrarca, la Garbo); a veces para referirse a sus obras (un Picasso). También se recurre al artículo para elevar al plural los patronímicos, dado que éstos son invariables en número: los González; los Vargas. Se emplea así mismo, el determinado cuando el nombre propio, va acompañado de un adjetivo calificativoo de un complemento preposicional( el genial Miguel Ángel); (el Picasso de la época azul).
OMISIONES DEL ARTÍCULO
El artículo se suprime ante el sustantivo en función de predicado nominal (Antonio quiere ser pintor), a no ser que se desee enfatizar el atributo(será un buen pintor), o éste vaya acompañado por otros complementos(Velázquez era el pintor de la corte).
EL ARTÍCULO Y LA SUSTANTIVACIÓN
El artículo no sólo acompaña al sustantivo dentro de la oración, también puede preceder al adjetivo(el bondadoso encuentra todas las puertas abiertas), al adverbio (no escuchamos el sí de la novia), a la conjunción (ya entiendo el para qué de todo esto), a la intejección (nos sobresaltó un ay angustioso), al pronombre (la suya es la mejor respuesta), al sintagma preposicional (el de arriba) o a una proposición subordinada (el que bien te quiere te hará llorar).
Opcionadlmente, el artículo se emplea también junto al sustantivo para reforzar su naturaleza nominal: el beber y el fumar están prohibidos para mí.
Algunas palabras sustantivadas y gran número de infinitivos han quedado como auténticos nombres que conviven con su empleo (el espantapájaro, el deber, el pésame).
El artículo neutro lo, presenta un caso especial de sustantivación, imprescindible para ciertos sintagmas y proposiciones subordinadas: ( lo de tu hermano me parece una injusticia), (debes tomar en cuenta lo que te expliqué), (me asusta e lo caro que es este libro).



COMPORTAMINETO DEL ARTÍCULO FRENTE A DETERMINADOS NOMBRES FEMENINOS
Ante los sustantivos femeninos que comienzan por a o ha tónicas, el correpondiente artículo determinado adopta la forma el procedente del femenino latino ela por ejemplo: el águila, el hacha, el alba, el agua. Este uso corresponde a razones históricas que marcaron la evolución de los artículos desde el latín al castellano.

EL ADJETIVO
Es una palabra o una parte de la oración qu acompaña al sustantivo, dependencia que se refleja en los planos morfológico, sintáctico y semántico de la lengua.
El adjetivo es una palabra variable en número y en la mayoría de los casos en género, por tanto adopta terminaciones gramaticales del sustantivo al que modifica para tener concordancia con él dentro de la frase.
Ejemplos: hombre-delgado (género) manzanas dulces (número)
niña-bonita (género) rosas rojas (número)
Semánticamente, sus funciones se resumen en la capacidad de modificar el significado del sustantivo, ya sea enriqueciéndolo al calificarlo o bien limitando y determinando su significado.

Por otro lado el adjetivo también admite sufijos y prefijos que pueden atenuar la cualidad, intensificarla o mostrar algún efecto.
Aumentativos
Grande-Grandulón
Diminutivos
Flaco-Flaquito
Despectivo
Guapo-Guapucho
Superlativo
Rápido-Rapidísimo

FORMACIÓN DEL ADJETIVO
A partir de los adjtivos primitivos o simples, la lengua es capaz de formar otros nuevos mediante sus habituales procedimientos de creación de palabras:
Derivación.
La mayoría de los adjetivos españoles son derivados, resultado de la adición de sufijos o prefijos a una palabra primitiva: azulado, verdecillo, ilógico.
Composición.
Los adjetivos compuestos nacen de la unión de dos o más adjetivos simples: rojiblanca, latinoamericano.
Parasíntesis
El tercer procedimiento combina los dos anteriores mediante la incorporación de sufijos a una palabra compuesta: todopoderoso, picapedrero.
APÓCOPE DEL ADJETIVO
Algunos adjetivos tienen la peculiaridad de que pierden su última vocal o sílaba cuando anteceden al sustantivo. Esta reducción afecta a palabras como bueno (buen), malo (mal), alguno ( algún) o santo (san), grande (gran).

CLASIFICACIÓN
Las dos funciones básicas del adjetivo son calificar o determinar al nombre, lo cual origina sus dos grandes grupos de clasificación.



EL ADJETIVO CALIFICATIVO
Se incluyen en este grupo la mayoría de los adjetivos españoles (amarillo, bonito, grande) y el participio pasivo del verbo, forma impersonal que éste adopta para funcionar como adjetivo (cantado)
El calificativo añade una cualidad o característica que complementa el significado del sustantivo al que acompaña. Por lo tanto resulta fundamental en cualquier descripción.
El adjetivo calificativo puede actuar como un auténtico sustantivo cuando es acompañado por el artículo neutro o por complementos y determinantes propios del nombre: lo correcto es confesar, ese joven alto es mi amigo. Este fenómeno se conoce con el nombre de sustantivación.
LOS ADJETIVOS DETERMINATIVOS
Carecen de significado propio, por lo tanto toman el contenido del sustantivo al que modifican.
Son morfemas independientes o separados del nombre .
Pueden ser posesivos, los que indican sentido de pertenencia (mío, tuyo, suyo, nuestro, vuestro), demostrativos indican ubicación espacial o temporal de los objetos (este, ese aquel), indefinidos cuantifican al sustantivo de forma vaga o imprecisa (otra, cierta, cada ,tanta, cualquier,tal, varios, pocas).
Los numerales expresan una cantidad exacta, dando un sentido de orden, éstos a su vez se clasifican
en cardinales ( cero, cuatro, cincuenta, doscientos), ordinales que expresan la posición de un objeto frente a un conjunto (primero, tercero, postrero), los múltiplos indican el número de veces que una cantidad contiene a otra( doble, triple, cuádruple), los partitivos que se emplean para expresar la división de una cantidad en partes ( medio, tercera, quinta).
Los interrogativos, se utilizan para interrogar o exclamar, se anteponen al sustantivo y se acentúan
(cuál, qué, cuánto ).

BILIOGRAFÍA

Enciclopedia Autodidáctica de lingüística y arte

Larousse, Gramática de la Lengua Española